Limpieza
El bebedero.
Una de las principales formas de mantener la higiene de la jaula de tu hámster es cambiando el agua con mucha frecuencia. Nuestro pequeño animal apenas consume agua (pero es esencial que siempre tenga a su disposición agua en todo momento) por lo que es un error esperar a que el bebedero esté vacío para rellenarlo. Lo ideal sería cambiar el agua cada dos días.
La rueda.
La rueda de tu animal es uno de los lugares en los que más porquería puede llegar a acumularse, también, a la vez, es uno de los lugares más difíciles de limpiar. Como recomendación, la rueda debiera ser como la que se ve en la foto, ya que las que tienen separación entre las barras, pueden causar fracturas a nuestro pequeño animal.
La jaula.
Lo más importante con diferencia es mantener limpio el suelo de la jaula. Lo más común es usar serrín especial para roedores, pero en mi caso utilizo una capa de lecho de maíz, sobre la cual esparzo el serrín y luego en zonas específicas, pongo una cantidad considerable de heno (del cual hablaré en el apartado de alimentación. El serrín es recomendable cambiarlo cada semana, pero aun así lo más lógico es ir controlando y cambiarlo cuando consideremos que está sucio.
El algodón.
El algodón puede ser una de las mejores camas para tu roedor, Venden algodón especial para roedores pero es mucho más económico el algodón normal, sin ningún añadido. Eso si, se recomienda cambiar el algodón con frecuencia ya que las heces se acumulan en él con facilidad.
Tu hámster.
Lo importante es que nuestro roedor esté limpio, debemos revisarlo diariamente y comprobar que su parte baja es de color blanco, lo que nos dice que no esta lleno de deposiciones y otras cosas que podrían enfermar a nuestro pequeño.
Todas las fotos de este apartado son sacadas por mi